Desarrollan Programa de Ética y Buenas Prácticas Corporativas para Pymes. La iniciativa incentiva el desarrollo de políticas corporativas en las pequeñas y medianas empresas para regular sus procesos internos previniendo las prácticas que puedan traducirse en casos de corrupción; más aún por la imperiosa necesidad de ganar competitividad, tanto en el mercado nacional como en el internacional.
Las más de 200 mil pequeñas y medianas empresas (pymes) que existen en Chile pueden certificar voluntariamente sus procesos internos para prevenir posibles delitos económicos, situación que puede resultar contraproducente si no cuentan con una política corporativa al respecto.
“Esta implementación de buenas prácticas permite a las Pymes generar controles internos, de manera que estén preparadas para la entrada en vigencia el cambio de Ley de Responsabilidad Penal, que hará obligatoria su existencia al interior de las empresas”, señala la Directora del Diplomado “Compliance y Buenas Prácticas Corporativas” de la PUC y Socia de BH Compliance, Susana Sierra.
Explica que: “Implementar en forma voluntaria las certificaciones permite que las empresas puedan educarse sobre el tema, y de este modo realicen una correcta implementación, fomentando la aplicación de buenas prácticas desde la base de la organización“
Las Pymes son cada día más conscientes de que es fundamental ejecutar algunos programas de cumplimiento normativo en sus organizaciones, a fin de evitar caer en malas prácticas que puedan traducirse en infracciones económicas, como cohecho, lavado de activos y financiamiento del terrorismo; más aún por la imperiosa necesidad de ganar competitividad tanto en el mercado nacional como en el internacional, pues las grandes corporaciones compradoras, así como las empresas del estado están empezando a exigir contar con políticas de buenas prácticas (compliance).
En este contexto, es recomendable que las pequeñas y medianas empresas establezcan sistemas reales de organización y gestión eficaces, específicos y adaptados a su realidad. Susana Sierra indica que “las Pymes son el verdadero motor del país y deben adaptarse a lo que ya tienen, pensando en prevenir estos delitos económicos, ya que de esta manera—una vez sea obligatoria la ley de Responsabilidad penal—su adaptación será completamente natural”.
La gerente de BH Compliance destaca que las pequeñas y medianas empresas tienen una considerable ventaja con respecto a las grandes compañías, ya que “para las Pymes es más fácil (prevenir delitos económicos), ya que sus dueños o administradores cuentan con un mayor contacto con los trabajadores, por lo que pueden transmitir el compromiso con su propio buen comportamiento”. Así mismo, “cuentan con un menor número de empleados lo que hace más fácil la labor de controlar el buen comportamiento del personal, por lo que las Pymes pueden resultar ser un verdadero ejemplo para las empresas más grandes”.
Metodología Pyme
“En BH Compliance hemos creado una metodología de certificación de modelos de prevención de delitos, especial para Pymes, no pensando en que se llenen de políticas, sino que adapten los modelos acorde a su realidad”. Este programa “es muy simple y busca que (por muy pequeña que sea) la empresa, tenga los controles adecuados para prevenir estos fraudes económicos”, sentencia Susana Sierra.
Las grandes empresas están exigiendo la implementación de este tipo de programas a sus proveedores, ya que cualquier problema que estos tengan, afectaría de manera considerable la imagen de las grandes compañías. Por ello se, convierte en un requisito fundamental contar con esta certificación de buenas prácticas corporativas. “Nosotros (BH Compliance) estamos promoviendo que las Pymes implementen sus modelos, o adapten sus políticas, para que estén preparadas para el crecimiento y las exigencias de las grandes empresas privadas y públicas”, afirma Susana Sierra.
En la actualidad existen pocas pymes que reúnan las condiciones necesarias, ya que no han creado mecanismos sobre el tema por lo que “nuestra labor es verificar que las Pymes tienen todas las herramientas necesarias y sepan utilizarlas de manera inteligente y efectiva, para no ser utilizadas para cometer ningún tipo de delito”, afirma la ingeniera comercial.
Sin embargo, para realizar este programa de Buenas Prácticas y Ética empresarial es necesario que los dueños o administradores de las Pymes adquieran un compromiso real, para ejecutar todas las medidas necesarias para lograr que la empresa se desempeñe en forma legal y ética. De esta forma, las pequeñas y medianas empresas pueden “generar confianza y evitar situaciones que afectan la imagen de la empresa, lo que se traduce en una reputación corporativa positiva y una clara ventaja ante la competencia”, argumenta Sierra.
Recomendaciones para Directores de Pymes
- Predique con el ejemplo.
- Capacite a sus colaboradores en lo “que no se puede hacer”.
- Evalúe en que instancias se relaciona con funcionarios públicos, y cree protocolos para estas circunstancias.
- Preocúpese de las salidas de caja de su empresa: cada pago a proveedores debe ser contra una entrada de servicio.
- Efectúe donaciones a instituciones que conozca; preocúpese del destino de su aporte, haga seguimiento.
- Analice que riesgos tiene de ser utilizado para lavar activos, sobre todo, a través de proveedores. Recuerde que un lavado de activos, lo que busca es obtener una factura, o algo que demuestre que tuvo ingresos.
- Revise su relación con la comunidad donde está inserta su empresa; si no lo quieren, algo está haciendo mal.
- Entregue herramientas, seguridad y confianza a sus colaboradores para que hablen con usted en caso que detecten anomalías en su empresa.
- Recuerde que si ocurre una irregularidad, el culpable será usted, no por cometer el delito, sino por no cumplir con el deber de dirección y supervisión; por no entregar las herramientas adecuadas a sus empleados para que esto no ocurra.
- Deje evidencia de sus acciones.
