Aramark e Indap firman convenio para fortalecer agricultura en Aysén. La iniciativa, que se enmarca dentro de los programas de desarrollo agropecuario de INDAP y “Desarrollo de Proveedores de Aramark”, permitirá mejorar la calidad de la oferta de hortaliceras locales.
Tres familias agricultoras de Coyhaique se convertirán en los primeros proveedores locales de Aramark en la región de Aysén. Esto, gracias a una alianza colaborativa entre el Ministerio de Agricultura, a través de INDAP, y la empresa que permitió generar un encadenamiento productivo para que pequeñas y pequeños productores formen parte de los menús en los contratos de la compañía en la zona.
A partir de este convenio público privado, se podrá diversificar la oferta de hortalizas en una región que se caracteriza por las dificultades para el abastecimiento de productos, además de ayudar a mejorar las oportunidades de crecimiento de pequeños agricultores, mediante capacitaciones, auditorías, asesorías especializadas y el financiamiento de esta nueva entidad.
“La gran finalidad de este convenio -así como muchos otros que hemos venido impulsando en distintas localidades desde Tarapacá a Aysén- es ir más allá que un simple compromiso de compra, apoyando a los agricultores locales para que puedan insertarse en el mercado de manera competitiva, a través del desarrollo de la gestión de calidad de sus productos y el aumento de su capacidad de comercialización”, sostiene Iván Mergudich Smoje, vicepresidente de Recursos Humanos y Asuntos Corporativos de Aramark Sudamérica.
Junto al secretario regional ministerial de Agricultura, Horacio Velásquez Fernández, y el presidente del Consejo Asesor Regional de INDAP, Linardo Schmidt Hornig, el director regional de INDAP, Marcelo Hernández Rojas, afirmó que el acuerdo implica asesoría técnica por parte de INDAP para que los horticultores alcancen niveles de calidad exigidos y certificados por empresas como Aramark.
“Uno de los ejes estratégicos de INDAP, dentro de la política pública impulsada por el gobierno de la Presidenta Bachelet para la agricultura familiar campesina, está en la promoción de vínculos estables entre pequeños agricultores con las empresas, a través de modelos de encadenamiento productivo, en lo posible innovadores, que den seguridad en la relación de mediano a largo plazo. Esto en particular en el rubro hortícola, que en la región tiene un espacio de crecimiento enorme, ya que abastecemos, en el mejor de los casos, hasta un 30 por ciento de la demanda regional”, destacó.
Una de las agricultoras incorporadas, Jessica Balkenholf, del kilómetro 13 camino Coyhaique-Balmaceda, sector Villa El Morro, indicó que este convenio les permitirá avanzar en buenas prácticas agrícolas y en la trazabilidad de la producción hortícola.
“Nos interesó mucho porque el convenio viene con una certificación de Global G.A.P., que es una empresa mundialmente conocida y eso nos podría garantizar un producto de excelencia. Nosotros comenzaríamos con la entrega de lechuga, cilantro y posiblemente zanahoria”.
El proyecto, que se se enmarca dentro de los programas “Alianzas Productivas” de INDAP y “Desarrollo de Proveedores de Aramark”, buscará contribuir al desarrollo económico sostenible local a través de la valorización de la agricultura familiar campesina, por lo que se espera ir sumando cada vez más actores a esta iniciativa.
