Personalmente nunca pensé que un día estaría sentado en la misma mesa discutiendo con una persona con síndrome de Down sobre el diseño de una caja de bombones. Tampoco imaginé nunca, o más bien, me costaba imaginar, que tuviera sentido montar un estudio profesional de diseño formado por creativos con discapacidad y jóvenes estudiantes de diseño
Y fíjate, después de unos meses de trabajo, esta Navidad ha salido a la calle uno de los mejores diseños de La casa de Carlota de este año: una deliciosa, enorme y roja caja de bombones con un sofisticado alce plateado en su tapa. Es la caja especial de Navidad con la que Nestlé obsequia a sus trabajadores y colaboradores.
Y este año también, La casa de Carlota ha sido escogida como una de las mejores empresas sociales del año y premiada en el festival de diseño más importante de este país. Cerramos el 2014 muy felices y contentos. Muchas gracias a todos los que hacéis La casa de Carlota y muchas gracias también, aunque casi mejor, felicidades, a todas las empresas valientes que han sabido pasar de las palabras a los hechos y que han descubierto que hay nuevas formulas empresariales más innovadoras de hacer empresa, de comunicarse con sus ciudadanos y de participar en la construcción del utópico “mundo mejor”, en el que la solidaridad y los negocios pueden y van de la mano. Tanto da si se trata de vender coches, bancos, lavadoras, compañías de seguros o una sencilla y roja caja de bombones.
Artículo de José María Batalla en el Blog de 1000friends.