Las matemáticas y la ciencia son cosa de hombres, ¿no?
Este post fue publicado originalmente en el blog Negocios Sostenibles del BID Por Kristin Dacey y Sanola Daley*
Las mujeres no son lo bastante inteligentes para ser ingenieras. A las mujeres no se les dan bien las matemáticas. ¿No es esa la razón por la que los hombres obtienen el 70% de los doctorados en matemáticas y el mundo se asombra cuando una mujer, Maryam Mirzakhani, gana el equivalente al Nobel de matemáticas por primera vez?
En Latinoamérica y el Caribe hay más mujeres estudiando una carrera universitaria que hombres, sin embargo los datos sobre cuántas trabajan en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (CTIM) son escasos. Un estudio reciente del BID encontró que sólo un 36% de los graduados en CTIM son mujeres. Dicho de otro modo: sólo el 11% de los grados superiores obtenidos por mujeres en la región son en campos de CTIM.
Esta gran disparidad educativa tiene por fuerza implicaciones en la fuerza laboral, especialmente en el sector privado.
El Gobierno norteamericano ha reportado que las mujeres que trabajan en CTIM ganan un 33% más que aquellas que lo hacen en otras y que la brecha salarial entre hombres y mujeres es más pequeña en estas áreas. Pero si pocas deciden seguir una carrera universitaria en CTIM, menos aún se gradúan y trabajan en estos campos.
¿Por qué huyen las mujeres?
Hay varios factores que explican por qué las mujeres se mantienen alejadas de estas ciencias. Primero, porque la sociedad se empeña en repetir que los temas y profesiones relacionadas (como las ingenierías o energías renovables) son para hombres. Y estos estereotipos son difíciles de romper.
Segundo, un reporte de 2012 encontró que el 38% de las mujeres que trabajan en ingeniería en EE.UU. opta por dejar la industria debido a condiciones hostiles en la cultura laboral, falta de flexibilidad y pocas oportunidades para desarrollarse profesionalmente. Los investigadores se sorprendieron con lo poco que las mujeres mencionaban razones familiares, rompiendo el mito sobre uno de los principales motivos de abandono.
Tener más mujeres en CTIM beneficia a los negocios
Más y más investigaciones concluyen que la diversidad, entre otras cosas de género, es esencial para mejorar la productividad, la competitividad e innovación de las compañías, así como que la inversión en las mujeres es crítica para la reducción de la pobreza. No olvidemos que influencian de forma decisiva hasta un 80% del gasto mundial.
Por eso, su participación es importante en el desarrollo de productos y servicios y en cómo las compañías responden a este segmento del mercado. Según un estudio, las compañías con equipos de liderazgo diversos que incluyen a mujeres son más innovadoras y generan mayores retornos financieros.
La diversidad conlleva innovación y la innovación es esencial para el crecimiento. Según un estudio del BID, los países con mayor proporción de ingenieros tienden a crecer más rápido que aquellos con más graduados en otras disciplinas. Por lo tanto, es vital incrementar el número de estudiantes en CTIM, y una forma es atrayendo a mujeres.
¿Qué se puede hacer?
Los estudios sobre negocio y desarrollo muestran claramente que la región debe invertir en el crecimiento económico de CTIM, y el sector privado juega un papel importante en esto.
Podemos:
Resaltar la importancia de CTIM en las instituciones de educación superior y trabajar con la educación básica y las instituciones públicas para crear un flujo de mujeres jóvenes motivadas con acceso a opciones innovadoras de financiación.
Podemos:
- Resaltar la importancia de CTIM en las instituciones de educación superior y trabajar con la educación básica y las instituciones públicas para crear un flujo de mujeres jóvenes motivadas con acceso a opciones innovadoras de financiación.
- Involucrar a las compañías en campos relacionados con las energías renovables y telecomunicaciones, entre otros, y hacer más atractivos estos sectores y carreras para las mujeres jóvenes y estudiantes más diversos.
- Trabajar con el liderazgo corporativo para que las compañías sean más inclusivas y den respuestas a un mano de obra diversa, adoptando una cultura de trabajo equitativa, mejores estrategias de contratación y retención, desarrollo de talento y flexibilidad laboral.
Debemos romper los estereotipos de género y demostrar a las compañías y a los educadores que la equidad de género en CTIM no sólo es lo correcto, sino el camino más sabio.
¿Cuáles son tus ideas para mejorar la equidad de género en CTIM en Latinoamérica y el Caribe?
*Kristin Dacey trabaja como Oficial Sr. de Inversiones en originación y estructuración de proyectos del Sector Privado en infraestructura social, principalmente en educación y salud, para el Dto. de Financiamiento Estructurado y Corporativo del BID. Tiene una Maestría en Gestión Global de la Thunderbird School of Global Management, un MBA de Arizona State y un BS y BA de Virginia Tech.
*Sanola Daley forma parte del Programa Jóvenes Profesionales en el Dto. de Financiamiento Estructurado y Compartido del BID, donde trabaja la integración del empoderamiento económico de la mujer y la igualdad de género en su estrategia y operaciones. Originaria de Jamaica, ha pasado por Nueva York, Puerto Rico y Costa Rica.